Balance de un año condicionado por la pandemia

Las terminales automotrices habían terminado 2019 con la esperanza de que 2020 les deparara un mejor desempeño en lo que se refería a las ventas de camiones, ya que el año pasado la comercia­lización de pesados había sufrido mes a mes un retroceso que terminó con una baja en los patenta­mientos de 43,10% respecto de los de 2018.

Sin embargo, la llegada de la pandemia puso freno a esa esperanza de la industria. Así, un mes antes de cerrar el año, el acumulado entre enero y noviembre alcanzó las 9.792 unidades, 11,3% menos que las 11.045 que se habían comercializado durante los 11 primeros meses del magro 2019. Aunque noviembre mostró un crecimiento de 28,8% en patentamientos respecto de igual período del año anterior, lo que volvió a generar optimismo en el sector.

La Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (Acara) refirió que durante los primeros once meses del año, Mercedes-Benz tuvo una participación de 35,9% del mercado, con 3.513 vehículos; Iveco, 20,2%, con 1.982; Volkswagen, 13,1%, con 1.284; Scania, 11,9%, con 1.163; Volvo 8,5%, con 833; Agrale, 2,8%, con 274, mientras que otras marcas se repartieron el seis por ciento restante, con 595 camiones.

Un"parate" desde marzo

Al ensayar una síntesis de la situación, Manuel Mantilla, presidente y CEO de Mercedes-Benz Argentina, recordó que "más allá de la coyuntura actual, la industria automotriz local ya se encontraba en una situación difícil desde hacía varios años".

"Seguimos trabajando, en conjunto con las autoridades, con la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa) y el Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (Smata), en propuestas para dar competiti­vidad al sector, a fin de preservar la actividad industrial, asegurar la continuidad del negocio y cuidar a nuestros empleados. Necesitamos medidas estructurales con visión a largo plazo en pos de una industria sostenible, integrada y sustentable", completó.

Para Francisco Spasa­ro, director comercial de Iveco Argentina, "2020 fue un año muy atípico, lleno de desafíos, que hicieron más complejo nuestro mercado, más de lo habitual. Sin embargo, nos sobrepusimos a todos esos obstáculos. Trabajamos en equipo, nos adaptamos a la nueva realidad. Fuimos flexibles, solidarios y sobre todo estuvimos muy cerca de nuestros clientes".

A esa definición, agregó: "Arrancamos el año a full con un montón de planes para mejorar la percepción de los clientes, pero nos encontramos en marzo con una cuarentena, parate de ventas, con algunos talleres que debieron cerrar. Nos reenfo­camos rápidamente para asegurar el servicio de los vehículos que seguían circulando".

"Es un año que pese a todas las dificultades mantuvimos nuestro programa de lanzamientos de nuevos vehículos. Pudimos dar respuesta de manera cierta a lo que necesitaba el transporte, que no dejó de ser una actividad esencial y que no paró en ningún momento del año, más allá de lo que le pasó a otras actividades económicas", reconoció Federico Ojan­gu­ren, gerente general de la División Camiones y Buses de Volkswa­gen Argentina.

"Desde el lado de los números, en el contexto de la caída del mercado general, la división Camiones y Ómnibus de Volkswagen crece 30% en su nivel de actividad. También aumenta la cantidad de entrega a su red de concesionarios casi un 50%, alcanzando el tercer puesto del market share del mercado subiendo casi cuatro puntos porcentuales", completó.

Protocolos e incertidumbre

De 134 empresas asociadas a la Acara, 50% espera estabilidad para los próximos tres meses; 27% opina que la situación será peor, y 23%, que mejorará.

La explicación de Andrés Leonard, CEO de Scania Argentina, fue que "frente a un contexto tan particular, la empresa dirigió sus esfuerzos a la aplicación de protocolos sanitarios en su fábrica de Tucumán, lo que trajo como resultado ser la primera automotriz en retomar las operaciones cuando comenzaron a volver las actividades".

"En marzo tuvimos que cerrar. Fuimos la última empresa del sector en cerrar y la primera en abrir, en abril, cuando el presidente Alberto Fernández hizo una visita a la planta y pudo comprobar los protocolos de seguridad que aplicábamos", recordó y precisó que "en la red de servicios, talleres y concesionarios cerramos sólo un día, apostando a que el transporte era esencial y con los protocolos se dio seguridad y tranquilidad a todos los involucrados".

Por su parte, Adriano Merigli, presidente de Volvo Trucks y Buses Argentina, dijo que "a pesar de las bajas ventas de camiones durante este año, la firma redobla la apuesta en el potencial del mercado argentino". Para el directivo la empresa de origen sueco demostró "acá y en el mundo que somos una marca fuerte y que podemos pasar por cualquier situación".

Volvo cierra 2020 con "13% de market share en camiones de más de 16 toneladas, obteniendo así la segunda mejor participación de su historia", dijo Merigli y celebró: "En un año de tantas incertidumbres, terminar con la seguridad de que fue uno de los más desafiantes de la historia, no es poco".

El gerente comercial de Agrale Argentina, Ignacio Armendariz, reconoció que "la actividad en camiones no ha tenido este año el nivel de ventas esperado, debido, obviamente, a los múltiples inconvenientes generados por la pandemia. No obstante ello, hemos logrado niveles de comercialización aceptables, especialmente del nuevo modelo A 8.700 4×4 que lanzáramos a fines de 2019".

"La pandemia modificó sensiblemente los planes en 2020, especialmente en la producción de chasis para buses. Eso nos obligó a hacer un reacomo­damiento interno en el sentido de asignación de prioridades, funciones y distribución de gastos que nos está permitiendo terminar el año en una situación sana desde el punto de vista de la economía de la empresa", añadió.