Cracks en la cancha de las letras

Por Oscar Martínez - Albert Camus, el autor de "La peste" o "El extranjero", fue un joven arquero del Racing Universitario de Argel con gran futuro, pero la tuberculosis que sufrió a los 17 años lo retiró definitivamente de las canchas. Su cita más mencionada entre todo lo que escribió sobre el juego que lo apasionaba es: "Todo cuanto sé con mayor certeza sobre la moral y las obligaciones de los hombres, se lo debo al fútbol".
Nacido en París en 1905, la figura de Jean Paul Sartre representa a la de uno de los más geniales pensadores del siglo pasado. El filósofo, máximo exponente del existencialismo, siempre comprometido con los avatares políticos contemporáneos, comenzó de pronto a interesarse por el fútbol observando al Paris Saint-Germain. Se lo suele recordar por aquello de "En el fútbol todo se complica por la presencia del equipo adversario". Sin embargo, su frase que muchos de nosotros compartimos a diario es: "El fútbol es una metáfora de la vida".
El escritor y poeta uruguayo Mario Benedetti, miembro de la Generación del 45 y autor de "La Tregua", "Gracias por el fuego" o "Poemas del Alma", entre muchos otros, nunca dudó en presumir de las dos copas del mundo que ganó la selección de su país. "Gracias al fútbol, a los uruguayos nos conocieron en todo el mundo", aseguró cierta vez. Su descripción sobre las tribunas sin público es memorable. "Un estadio de fútbol vacío es un esqueleto de multitud", al igual que su reflexión sobre la Mano de Dios, "Aquel gol que le hizo Maradona a los ingleses con la ayuda de la mano divina es, por ahora, la única prueba fiable de la existencia de Dios".
Sir Walter Scott, el escritor escocés autor de "Ivanhoe" o "El Pirata", tenía muy claros los paralelismos entre la vida y el fútbol. Fue un gran cronista deportivo en su país. Así escribió sobre los equipos Ettrick y Selkirk para el Edinbugh Jounald. "Quitaos la ropa muchachos y vamos allá, aunque el clima sea malo. Y si por desventura sucede que caes en una jugada, hay cosas peores en la vida que caer en los brezos, la vida en sí misma es un partido de fútbol".
El Tottenham Hotspur tiene el honor de contar entre sus hinchas célebres al autor de "Los Versos Satánicos", Salman Rushdie. Hace unos años escribió en su cuenta de twitter, "Publicar un libro y que te hagan una película está todo muy bien, pero que el Tottenham gane 3 a 2 al Manchester United…no tiene precio". El escritor y ensayista británico, realizó en 1999 un artículo de ocho páginas en The New Yorker, titulado "El juego del pueblo. La educación de un aficionado al fútbol", que aún hoy tiene valor.
Oscar Fingal O'Flahertie Wills Wilde, simplemente Oscar Wilde, que nació en Dublín, Irlanda, el 16 de octubre de 1854, es considerado uno de los dramaturgos más destacados del Londres victoriano tardío. Pero además fue una celebridad de la época debido a su gran y aguzado ingenio. Hoy es recordado por sus epigramas, sus obras de teatro y la tragedia de su encarcelamiento, seguida de su temprana muerte. El creador de personajes como Dorian Gray o El Fantasma de Canterville dejó dos frases geniales sobre el fútbol. "El rugby es un juego de bárbaros practicado por caballeros y el fútbol un juego de caballeros practicado por bárbaros". "Como juego, el fútbol está muy bien para chicas toscas, pero es apenas conveniente para chicos delicados".
Además de ser un reconocido hincha del Arsenal, el escritor inglés Nick Hornby, es autor de "Fiebre en las gradas", considerado como uno de los mejores libros escritos sobre fútbol. La obra consigue atrapar al lector con una mezcla de fino humor inglés y cronología de la historia de su equipo contada desde la visión de un chico que fue creciendo y cambiando todo en su vida salvo su pasión por el equipo del norte de Londres. "Me enamoré del fútbol igual que más tarde me enamoré de las mujeres, de repente, inexplicablemente, sin crítica, sin pensar en el dolor o los trastornos que traería consigo", relata en el libro.
George Orwell, autor de "1984" y "Rebelión en la Granja", solía apelar a la ironía para referirse al fútbol. En diciembre de 1945 escribió un artículo sobre el espíritu deportivo, tras una polémica gira del Dínamo de Moscú por Gran Bretaña que terminó en una batalla campal con Arsenal, en el partido disputado en Glasgow. "Fútbol, un deporte en el que todo el mundo sale herido y cada nación tiene su propio estilo de juego. El fútbol no tiene nada que ver con el juego limpio. Está ligado con los celos, el odio, la jactancia y el poder sádico de presenciar la violencia. En pocas palabras, es como la guerra pero sin los tiros", cerró dramáticamente.
El autor de "La Naranja Mecánica", Anthony Burgess, escribió mucho sobre fútbol en las décadas del setenta y ochenta, incluyendo un artículo sobre la tragedia del Hillsborough en 1989, cuando se produjeron 96 muertos por una avalancha durante un partido de Copa. "Cinco días son para trabajar, como dice La Biblia. El séptimo día es para el Señor, tu Dios. El sexto día es para el fútbol", sentenció cierta vez.
Roberto Fontanarrosa no podría haber nacido en otro lugar que no sea Rosario, ciudad apasionada por el fútbol, cuna de uno de los clásicos más extraordinarios, como Central y Newell's, y patria de Messi, Bielsa, Menotti, Di María, entre cientos. El Negro es autor del que es considerado como el mejor cuento de fútbol de todo el mundo, "19 de diciembre de 1971", la historia de la pasión y muerte del viejo Casale. Algunas de sus frases sobre el juego que lo apasionaba son memorables. "Creo que si no se entendiese que esto es una pasión, y las pasiones son bastante inexplicables, no se entiende nada de lo que pasa en el fútbol". "Central es prioridad uno. No me vengan con el cumpleaños de mamá. Yo me voy a la cancha. Eso es innegociable". "Algunos intelectuales serios habrán ocupados sus horas leyendo a Tolstoi mientras yo leía El Gráfico". "Sólo dos veces mi mujer me despertó antes de las diez de la mañana: una fue cuando me dijo: "invadieron las Malvinas". Y la otra: "Diego firmó para Newell's". Dos catástrofes". "Tengo dos problemas para jugar al fútbol. Uno es la pierna izquierda. El otro es la pierna derecha".  
Los argentinos somos reconocidos como extremistas, y por pasarnos de un lado a otro sin demasiados preámbulos. Ahora mismo, por ejemplo, paso de Fontanarrosa a otro argentino genial, pero curiosamente enemigo del fútbol. Y es raro encontrar a alguien nacido en estas tierras que tenga semejante aversión sobre el juego que la mayoría amamos. Jorge Luis Borges, ese fenomenal escritor que encontró en el reconocimiento de la gente lo que sistemáticamente le negó la Academia Sueca de Literatura, tiene frases inolvidables como "El fútbol es popular porque la estupidez es popular" o "El fútbol en sí no le interesa a nadie. Nunca la gente dice «qué linda tarde pasé, qué lindo partido vi, aunque perdió mi equipo". No lo dice porque lo único que interesa es el resultado final. No disfruta del juego".