CNN Radio Rafaela

Rápido como el viento

Como todos los Peugeot, pasaron como un OVNI, deslumbraron y se alejaron dejando mucho para el asombro, el análisis, y por su notable velocidad, a tal punto que este 905 estuvo a la altura de los Fórmula 1, mucho más livianos para competir, lógicamente, creados para circular mucho menos tiempo en pista.

Especiales - Contratapa 10/05/2022 Redacción Web Redacción Web
FOTO 1.jpg

Por Esteban Soldano - El Peugeot 905, un Sport prototipo, que no solo quedó en la historia por ganar dos veces en forma consecutiva las 24 horas de Le Mans en los años 1992 y 1993 sino porque con el auto equipado para la carrera estuvo casi a la par del Fórmula 1 más rápido en escenarios donde esta categoría era habitué. 
Diseñado por Dassault (fabricante de aeronaves civiles y militares) estaba dotado de un chasis de fibra de carbono y un motor de aleación liviana, el SA35-A1 de 3499 cc. V10 atmosférico, similar a los de Fórmula 1 de su tiempo. Fue construido en la sede de Peugeot Talbot Sport en Vélizy-Villacoublay en las afueras de París y oficialmente presentado el 4 de julio de 1990 en el Circuito de Nevers Magny-Cours con Jean-Pierre Jabouille al mando. Debutó en las últimas fechas del mundial de resistencia de 1990, con Jabouille y Keke Rosberg.  
También hicieron exitoso al Peugeot 905, su poco peso de apenas 750 kg., el embrague tridisco de carbono, los frenos a discos ventilados de carbono y los neumáticos especialmente desarrollados por Michelin. Las dimensiones del 905 son 4.800 mm de largo, 2.800 mm entre ejes, 1.960 mm de ancho y 1.040 mm de alto. 
La carrocería en su sección frontal poseía rasgos de diseño de terminación similares a los de los Peugeot de calle de aquella época, rematado en su trompa con una pequeña parrilla central con el logo del león. 
Esta historia empezó cuando Peugeot decide formar un gran equipo para competir en el campeonato Mundial de Sportscar en 1991para lo cual pone en lo más alto al considerado el mejor navegante de Rally de todos los tiempos, Jean Todt, por entonces ya retirado de su participación activa en las carreras.  
La primera temporada completa de participación el auto se mostró competitivo entre los del Grupo C, pero más lento que el Jaguar XJR-14 y también poco fiable, retirándose de a las cuatro horas de las legendarias 24 Horas de Le Mans. Sin embargo logró obtener una victoria en Suzuka, Japón.  
Con esta experiencia el auto fue redefinido totalmente especialmente en la aerodinámica, así nació el 905B, destacándose el alerón trasero de dos niveles y un spoiler delantero de todo el frente que podía ser opcional. En cuanto al motor se lo sustituyó por uno más potente, el SA35-A2. Esta versión debutó en Nürburgring, en ese mismo 1991. Estos avances permitieron al equipo terminar el año ganando en Magny-Cours y México así el subcampeonato de esa temporada del Campeonato Mundial de Sportcar. 
Para 1992, junto a Toyota fueron los dos únicos vehículos que participaron con apoyo oficial de marcas en el Campeonato Mundial de Sportcar. En las 24 Horas de Le Mans se desató una fuerte competencia entre los coches del Grupo C. El 905B logró ganar el clásico francés y colocar en tercera ubicación al otro auto también oficial. La formación ganadora estuvo integrada por Derek Warwick, Yannick Dalmas y Mark Blundell. Victoria que fue repetida en 1993 esta vez conducido por Geoff Brabham, Christophe Bouchut y Eric Helary, que además, colocó todos sus autos en el podio. 
Todo salía tan bien que Peugeot triunfaba en forma contundente donde competía y con los éxitos recientes decidió, siempre con Jean Todt a la cabeza, hacer un Fórmula 1, para lo cual estaban todas las condiciones dadas para el éxito. Así fue que anuncian oficialmente el desembarco en el Campeonaato Mundial de Fórmula Uno con un equipo íntegramente francés, el mismo que construyera el Sport Prototipo 905. Un año después llegó el anuncio oficial que eso no sucedería. El equipo fue disuelto y Jean Todt emigró a Ferrari donde a junto a Michael Schumacher como piloto, allí protagonizarían la mejor campaña deportiva en esa categoría para la casa de Maranello y una de las mejores de todos los tiempos para la máxima. El Peugeot 905 de 1992 es el más rápido de los Sport Prototipos de todos los tiempos.
En 1992 se quedó a una media de 4"65 de distancia de la pole de F1, quedando en Magny Cours a apenas 2"6. Por el contrario, en Suzuka se quedó a 6"6, en lo que fue la distancia más grande.
En 1993 no hubo campeonato y no se puede comparar, aunque sí hubo 905 -y Toyota TS010 que estaba a su altura- en Le Mans, que si bien no mejoraron la pole -se quedaron a 3"- mejoraron la vuelta rápida -el Toyota la hizo- en 5".
Eso en un trazado convencional rondaría el segundo y medio de mejora. Pero no hay tiempos en otros trazados para comparar con la F1. El caso es que en 1993 los F1 no mejoraron siempre, lo cual hace suponer que la brecha sería menor.
Y eso en coches con el mismo motor pero con 245 kílos más y sin suspensión activa.
Es lo más cerca que un biplaza ha estado jamás de un F1. Aunque cabe mencionar que Porsche en el 2018 bajó los tiempos de la F1 en Spa Francochamps con una evolución del 919 Hybrid que ganó las 24 Hs de Le Mans y el título del WEC en 2017, batió el récord de Lewis Hamilton con el Mercedes W07 en ese mismo escenario, pero descargando todo el equipamiento de un auto cargado para carreras de larga duración, que sin dudas también es un gran mérito y habla a las claras de la importancia de este tipo de vehículos en cuanto a ingeniería de vanguardia y prestaciones que lo ponen a la par o por encima de un F1, en el punto más alto de la vanguardia del automovilismo de competición.
Ahora están entre 8 y 10" por vuelta más lentos, lo mismo que en la época dorada del grupo C con los 956/962, LC2, Jaguar y Sauber Mercedes. 
El punto de partida es que lo más veloz es un monoplaza de F1, en este caso, y para ese tiempo del desafío es cuando la brecha ha sido la menor.
Tomando como fecha de referencia a partir de 1982, con la entrada en vigor del reglamento grupo C.
Teniendo en cuenta que desde, 1970 aproximadamente, no hay nada más veloz en un circuito que un F1, y este 905 es lo más cercano que ha habido y de alivianarlo de equipamiento innecesario para la duración de una Grand Prix de dos horas de duración, todo indicaría que lo hubieran superado como Porsche en su momento lo hizo en Bélgica. 

Lo más visto