«Tenemos que buscar alguna solución que sea compatible»

Productores Unidos de Rafaela y productores agrícolas de otras localidades, llevaron a cabo este viernes por la mañana un nuevo encuentro para continuar trabajando sobre sistemas agropecuarios que permitan mantener la productividad y la sustentabilidad ambiental y económica de los campos periurbanos.
Atendiendo a la demanda del sector, el INTA Rafaela, a través de su director Ing. Jorge Villar, y de la participación de especialistas de las distintas disciplinas de la Unidad, comenzaron con las labores para acompañar y guiar a los productores en la búsqueda de soluciones a los problemas que enfrentan en la actualidad. «Lo que pretendemos hacer, y estamos iniciando ya en una segunda reunión, una mesa de trabajo con los productores que están afectados, o que puedan estarlo en un futuro próximo, como para ir analizando las tecnologías disponibles que tenemos, tanto desde el punto de vista productivo, desde la posición física, sino que sea viable económica y ambientalmente sustentable», le dijo Villar al móvil de radio Universidad CASTELLANOS y añadió que «dentro del abanico de propuesta que existen, estuvimos haciendo un análisis de cuáles son económicamente viables y que tienen una respuesta y que tenemos experiencia, y a partir de ahí trabajar con los productores en cuáles son aquellas propuestas que le puedan llegar a ser de utilidad, o pensar la viabilidad práctica de implementación para buscar una solución al problema que están teniendo», sostuvo el director.
Cabe destacar que es esencial el involucramiento de esta prestigiosa institución, como parte fundamental del Sistema de Ciencia y Tecnología Agropecuaria, a la hora de brindar opciones productivas equilibradas en las cuales se minimicen los efectos de las aplicaciones de fitosanitarios sobre el medio ambiente, se proteja la salud de la gente y se resguarde la productividad y la economía rural.
Por otra parte, la discusión y el cuestionamiento sobre la forma en que los productores rafaelinos y de otras localidades aplican fitosanitarios en sus campos, sin tener ninguna evidencia científica cierta sobre su riesgo para la salud humana y el ambiente, los ha impulsado a tender lazos y aunar esfuerzos con otros productores de la zona para finalmente concretar este encuentro con el INTA, quien los guiará y acompañará en la elección de las mejores alternativas tecnológicas para seguir transitando el camino hacia una mayor sustentabilidad ambiental y económica, protegiendo la salud de todos los vecinos, tanto de la zona urbana como rural. «es una mesa de trabajo para analizar lo que se puede llegar a hacer en cada una de las situaciones particulares, ya que no podemos llegar a decir que un productor hoy afectado por el periurbano es el mismo que dos o tres. Creo que cada uno de los casos son casos individuales y tienen problemas particulares, que no necesariamente son compartidos con todos los productores», agregó Villar.

Análisis individuales

En relación a los problemas, el director del INTA sostuvo que existe problemas «productivos, técnicos, problemas que van desde lo social, como la inseguridad, donde ya nosotros no tenemos ninguna capacidad para proponer vías de solución», explicó el dirigente.
Haciendo alusión al primer encuentro, llevado a cabo hace algunos meses atrás, fue fundamental para conocer las distintas realidades e intentar interpretar las demandas que se exponían sobre la mesa: «nosotros desde el INTA debemos analizar y ver qué podemos proporcionar desde lo técnico, que es nuestro trabajo. Y además, quedamos en analizar las propuestas que tenemos, ya sean propias o rescatadas de alguna otra unidad o institución, con algún dato, resultados y ver cómo han sido en algunas tecnologías implementadas, para ver si se adaptan a las necesidades que tienen los productores», comunicó.
A modo de cierre, dijo que «nosotros tenemos la obligación para buscar algún tipo de solución para los productores afectados, que en muchos casos, es su forma de vida, hasta inclusive es una propiedad que sienten que está siendo afectada y que es complicado de sostener. Yo creo que tenemos que buscar alguna solución que sea compatible con la salud y la población urbana o por lo menos con la percepción, de qué es lo que hace la producción, y estos pulmones verdes que van quedando en la ciudad y en el periurbano de la ciudad, hay que preservarlos utilizándolos correctamente, sin impactar sobre la vida de la población urbana, ya que los pulmones verdes van a ser indispensables en el futuro, en la medida que siga creciendo la ciudad», finalizó Villar.