En la jornada de ayer TC 2000 llevó a cabo una intensa actividad en el Autódromo "Ciudad de Rafaela". La misma consistió en testear dos compuestos de neumáticos, para ese fin se convocó a cuatro autos de cuatro escuderías diferentes quienes cumplieron dicha labor que fue supervisada por el proveedor de neumáticos para evaluar su desgaste, prestación y comportamiento.
El objetivo del test fue recabar datos con vistas a la programación de la séptima fecha de la temporada a desarrollarse desde hoy, en el veloz escenario local con la utilización de dos chicanas, que la categoría no visita desde el 8 de junio de 2018.
Estuvieron presentes Agustín Canapino (Cruze) por Chevrolet, Leonel Pernía (Fluence) por Ambrogio Racing, Julián Santero (Corolla) por Toyota GR Argentina y Matías Cravero (Civic) por Honda Racing. 
Todo comenzó con un simulacro de clasificación, seguido a continuación de una simulación de competencia.
Se probaron diferentes configuraciones con bajas cargas aerodinámicas con el objetivo de lograr mayor velocidad y se compararon los datos recabados con los obtenidos en las simulaciones de alta velocidad efectuadas oportunamente tanto en Brasil como en la casa central en Italia.
El objetivo de esta prueba es garantizar la óptima puesta a punto de los neumáticos para que los mismos tengan un consumo equitativo sin perder performance.
Se probaron dos compuestos diferentes pensando en la degradación del mismo por la exigencia de óvalo con sus chicanas para garantizar no sólo la prestación óptima sino además la mayor y mejor seguridad y pensando en no exigir al mismo.