Lo asesinó y le prendió fuego dentro de su vehículo en la ruta 34: cayó un sospechoso

Un hombre fue detenido este jueves en Totoras como principal sospechoso de asesinar a Bruno Galetti, cuyo cuerpo apareció carbonizado dentro de un vehículo utilitario incinerado el pasado 15 de enero, dentro de un campo destinado a la plantación de maíz, ubicado a la vera de la ruta nacional 34, entre Luis Palacios y Lucio V. López. Por ese entonces, el abogado de la víctima había hablado de “un ajuste de cuentas”, pero esa versión está siendo investigada por la fiscalía de Homicidios de San Lorenzo. Hay pruebas que indican que le víctima estuvo con su auto en la casa del presunto agresor en base pruebas con luminol.
Se trata de Mario Santiago D., de 37 años, quien fue apresado por la Agencia de Investigación Criminal (AIC), en colaboración con la Tropa de Operaciones Especiales (TOE), en su casa de Fray Luis Beltrán al 1400, de la localidad totorense, la misma en la que vivía Galetti desde el pasado 25 de enero, diez días después de que Galetti apareciera muerto y carbonizado dentro de su vehículo, también incinerado, en la ruta 34.
Hasta ese entonces, el presunto homicida vivía en Saavedra al 800, de la misma localidad, y para sorpresa de la pesquisa “se mudo intempestivamente y sólo se llevó unas pequeñas cosas, entre ellas un sofá”, cuyo examen realizado con luminol arrojó “resultados positivos”.
“Pasadas las 22 de ese 25 de enero se retira intempestivamente y no se lleva prácticamente nada, salvo un sillón”, le precisó a La Capital el fiscal Aquiles Balbis, que investiga en el crimen.
Más allá de eso, para fuentes policiales había elementos estrechos que lo vinculaban al homicidio de Galetti, tanto por informes del geolocalizados de la Fiat Fiorino incinerada, declaraciones de testigos y el relevamiento de cámaras públicas y privadas. Sin embargo, desde la Fiscalía sostienen que tanto para la familia como para allegados a la víctima “no había evidencias de la relación que podrían haber mantenido entre ambos”.
“No está acreditada una relación estrecha; la única investigación que tenemos sobre esta persona y no está acreditada una relación estrecha, ya que la familia de la víctima desconoce la existencia y cualquier tipo de contacto con Galetti con el sospechoso”, aclaró Balbis.

La secuencia del crimen

Para la pesquisa, el vehículo de Galetti llegó al lugar donde fue encontrado incinerado a las 4.40 del 15 de enero y la teoría más fuerte es que se activó al prenderse fuego. a las 6 de ese mismo día el sistema de rastreo satelital ya estaba pretendiendo localizar el destino del vehículo.
“La madrugada del hecho, el vehículo de Galetti habría ingresado al domicilio del agresor y allí ocurren dos cosas que no son concomitantes: a las 3.30, el vehículo de Galetti se dirige hacia la puerta del presunto homicida y habría ingresado durante varios minutos. Posteriormente, cuando se retira el vehículo a las 4.05 ya nunca más detiene su marcha hasta llegar al lugar donde aparece la camioneta incinerada”, reveló Balbis.
A su vez, precisó que el vehículo apagó el contacto a las 4.40 y que horas más tarde, “el principal sospechoso fue divisado de forme pedestre por personal policial hacia Luis Palacios, con dirección a Totoras”. Al ser consultado por los efectivos, “el sospechoso adujo que era camionero y que había tenido problemas con el vehículo. También esgrimió que se desempeñaba en el rubro, puesto que era una actividad a la que también se dedicaba su familia”.
Sin embargo, fuentes de la investigación deslizaron que “se pudo constatar que hacía tres meses que no se desempeña como tal y tampoco se constató ningún tipo de avería de ningún camión en la zona”.
Otro de los hechos que decidieron al fiscal a dictar la detención del sospechoso es que, además de las pruebas “contundentes” de luminol en la cochera de su casa y en el sillón que mudó a la otra casa, la víctima “presentaba dos lesiones punzantes en el tórax: una de ellas le perforó el ventrículo derecho y tendría entidad para haberle causado la muerte”.

La hipótesis del crimen

Si bien el pasado 15 de enero el abogado de la víctima, Luis Rossini, había declarado en declaraciones radiales que el crimen había sido cometido “por un ajuste de cuentas”, a la pesquisa no le consta esa versión por el momento. “No sabemos de dónde surge esa versión, pero por la modalidad en la que se cometió da cuenta que había un conflicto más grande”, evaluaron.
Mientras tanto, de la casa ubicada en Saavedra al 800, de Totoras (se mudó el 25 de enero a Fray Luis Beltrán 1887 junto a su pareja e hijos), se secuestraron teléfonos y chips de celulares. Además, la pericia llevada a cabo con luminol en sofá mudado “dieron cuenta de que había rastros de haber sido lavado, y que el resultado de las mismas pruebas practicadas en el garage de ese domicilio fue categórica en cuanto a los restos de sangre”.

El hallazgo

Una vez detenido, al principal sospechoso se le formó una causa por el delito de homicidio calificado, mientras que la audiencia imputativa sería realizada durante el transcurso del fin de semana. También se secuestró el sillón y una hidrolavadora.
El cuerpo de Bruno Galetti fue hallado carbonizado en el interior de la Fiat Fiorino consumidos por las llamas el pasado 15 de enero en el kilómetro 22 de la ruta nacional 34, entre las localidades de Luis Palacios y Lucio V. López. Hasta ese momento sólo había una búsqueda de paradero emanada por la Unidad Regional X con asiento en el departamento de Iriondo.
Por su parte, Luis Rossini, representante legal de la víctima, había declarado en una radio de Cañada de Gómez que su cliente no había sido llevado por la fuerza sino que “iba a encontrarse con alguien”, aunque en su momento no supo precisar con quien ni cuál fue el motivo por el cual su cliente apareció luego sin vida, dentro del utilitario y con el cuerpo calcinado.
El cuerpo de Bruno Galetti fue hallado carbonizado en el interior de la Fiat Fiorino consumidos por las llamas el pasado 15 de enero en el kilómetro 22 de la ruta 34, entre las localidades de Luis Palacios y Lucio V. López. Hasta ese momento sólo había una búsqueda de paradero emanada por la Unidad Regional X con asiento en el departamento de Iriondo.