En el departamento Castellanos se sembró un 40% menos de trigo

Hace algunas semanas la Ing. Agr. Verónica Sapino del INTA Rafaela comentaba el retraso – rondaba el 20%- que se veía en los lotes destinados al trigo en relación al final de la siembra . Sin embargo, hoy con esa etapa concluida el cultivo tiene un 40 por ciento menos de hectáreas cubiertas.

Desde la Agencia de Extensión Rural Castellanos del INTA, su responsable, el Ing. Agr. Carlos Callaci explicó que “hasta que no haya una imagen satelital a futuro, porque ahora es muy difícil de precisar, pero cuando se puedan ver todos los lotes podremos tener un dato concreto, sin embargo la estimación que hacemos al recorrer todo el departamento es que estamos alrededor de un 40 por ciento menos de trigo sembrado. Es muy baja la superficie de trigo”.

Junto con la ingeniera Daniela Faure cada mes hacen un recorrido riguroso, que se refuerza en el resto de las semanas con visitas puntuales, donde quedó a la vista la faltante de la apuesta por el cultivo, en nuestra región, donde por ejemplo “entre Marini y Ramona casi no hay lotes de trigo”, Así, esta campaña en el Departamento Castellanos puede estar entre las de menor rendimiento de los últimos años, sobre el total de sus cien mil hectáreas productivas.

Consultado sobre el estímulo que se percibe entre los productores, “el ánimo siempre es bastante débil, pero sin humedad en los perfiles no se puede hacer nada, es por eso que hay una reducción en los lotes… Sin embargo, los productores tienen que seguir trabajando, tienen la necesidad de hacerlo, por eso algunos se arriesgaron con el trigo”.

Lo que está a la vista que “hay muy pocos lotes que vienen relativamente bien”, para lo cual las lluvias tímidas de estas semanas pueden colaborar en mejorar los resultados. El estado actual está en fase de macollaje, en la mayoría con uno o dos macollos, que podrían llegar a sumar algún otro, pero si los precios no son buenos va a ser difícil cubrir los costos y mucho más para quienes estén en tierra alquilada.

El agua útil en los perfiles estaba al inicio de la campaña entre uno y dos metros cúbicos de agua por hectárea, hasta el metro de profundidad, con lluvias actuales por debajo de la media histórica. La perspectiva de rendimiento está recortada al menos en un 25 por ciento, por lo tanto se podrían dar entre 1.125 y 1.725 kilos por hectárea, mientras que podrían dar hasta 4.250 kilos, aunque en años históricos se superan los cinco mil kilos.

Para tener una parámetro, en la Estación Experimental Rafaela del INTA se registra un déficit sobre el promedio de 243 milímetros, con períodos muy largos sin lluvias, o registros escasos en abril y mayo que son meses clave.

Si bien los cultivos no rendirán lo esperado, se ven trabajos en los lotes vacíos. Se hace control de malezas e incluso muchos productores ya piensan en la cosecha gruesa. Por lo tanto quienes vienen de soja, sin maíces, deberían apostar el maíz de primera. Sobre todo si las precipitaciones siguen acompañando, aunque sea levemente.