«Perotti ha sido una decepción»

Clara García es precandidata a senadora nacional por el socialismo dentro del Frente Amplio Progresista. Ayer visitó Rafaela y, respetando los protocolos correspondientes, mantuvo encuentros con dirigentes y simpatizantes del PS del departamento Castellanos como así también con representantes de instituciones, entre ellas la presidenta de CAPRHEBAR, Silvina Imperiale con quien dialogó sobre la situación del sector gastronómico y hotelero. «Ante el dolor, decidimos ir al frente» cuenta un video que fue compartido por las redes sociales y que fue trending topic en Twitter. Así se refiere a la decisión de Clara García, viuda del exgobernador Miguel Lifschitz, de encabezar la lista de senadores. 
En diálogo con Diario CASTELLANOS, la dirigente resaltó: «ustedes saben del fuerte golpe que hemos tenido en mi caso a nivel personal pero también como Partido y como Frente. Perdimos un dirigente indiscutido, una figura irremplazable en un momento crucial en la vida política. Tuvimos que anticipar tiempos para que quienes quedamos, tomemos los roles que quizá no eran los previstos. Miguel era el referente. Su equipo, con su propio legado y el de Hermes Binner, decidimos tomar esa antorcha, mantenerla encendida y avanzar de una manera colectiva hacia este proyecto». El espacio, además de las propuestas nacionales, oficializó 160 listas en pueblos y ciudades de toda la Provincia: «a pesar del golpe, a pesar del dolor estamos aquí muy vivos pensando en el futuro de Santa Fe», resumió.
La candidata es actualmente diputada provincial. Nació en Rosario y desde 1986 milita en el socialismo. Contadora y Licenciada en Administración (UNR) con posgrado en Dirección de Empresas en la Universidad Austral. Formó parte del primer gobierno socialista en la Municipalidad de Rosario en 1989 «donde Hermes Binner era secretario de Salud, Miguel Lifschitz era director de Vivienda, Mónica Fein creó el Instituto del Alimento para nombrar algunos referentes», rememora García, que en ese momento era  subsecretaria de Economía, y luego pasó a diferentes áreas como directora del Banco Municipal de Rosario, responsable de Servicios Públicos, de Producción y Desarrollo Local. Durante la gestión de Lifschitz, visitó junto al por entonces Gobernador, a cada una de las 365 localidades de Santa Fe.
Resaltando la coherencia destacó: «en estos tiempos vemos a muchos políticos pasar de una camiseta a otra, esto demuestra que les falta la capacidad de construir de manera colectiva. Eso implica generosidad, paciencia y saber ceder. Si tenés un objetivo en común, debes hacerlo, eso es lo más importante».

«Desde la política tenemos que dar una respuesta humana»

Al hacer un análisis de la sociedad y su relación con la clase política, García destacó: «este año y medio de pandemia nos puso en una realidad completamente diferente. Hay más de 100 mil familias que hemos perdido un ser querido en el país. Es una marca terrible. Muchas otras han tenido la dificultad de la enfermedad, han perdido el trabajo, su negocio cerró. Desde la política tenemos que dar una respuesta humana. No son tiempos para las internas, para medir quién tiene más poder, ni de agresiones dentro del mismo frente o con los adversarios. Hay que volver a la normalidad donde los que pensamos distinto en política podamos ser adversarios pero construir juntos. De cara a un proyecto serio. Por respeto a toda esa gente que no la está pasando bien».

¿Cuál es su evaluación de la gestión de Omar Perotti hasta el momento?

Creo que Perotti ha sido una decepción. Demostró que gobernar es mucho más difícil que lanzar un par de slogans. Muchos de ellos apelando a cuestiones muy sensibles de la gente. Perotti venía precedido de cierta trayectoria, quizá de cierto prestigio que no pudo demostrar en este cargo de gobernador. A todos nos sorprendió que durante la transición (que fueron seis meses entre las elecciones y la asunción en el cargo) no haya preparado sus equipos, ni proyectos. Pasaron varios meses luego de diciembre de 2019 sin que termine de armar sus equipos. Después demostró que definitivamente le falta escala para el gobierno. Esos proyectos no aparecieron. Aparecieron las disputas internas que quizá se hizo más visible en su bloque de senadores, en la partida de ministros claves, hoy en este armado electoral que es institucionalmente crítico, donde una vicegobernadora apuesta a un cargo y un gobernador apuesta a un otro cargo testimonial en otra nómina. Esta situación nos deja de rehenes a los santafesinos. Nos quedamos con un gobierno que no entendemos  cómo va a seguir adelante con semejante cruce. Cuando nos dijeron que el peronismo iba unido en la diversidad, definitivamente no era cierto.